La evaluación va íntimamente ligada a las prácticas pedagógicas, ya que el qué y cómo se evalúa condiciona el qué y cómo aprenden los estudiantes.
El último Policy Brief publicado por el Centro de Estudios de Políticas y Prácticas en Educación, CEPPE UC, muestra los resultados y recomendaciones que se desprenden del “Estudio sobre Reglamentos de Evaluación de los Establecimientos Educacionales Chilenos” de UNESCO-MINEDUC, el cual fue adjudicado por la Facultad de Educación UC y gestionado por CEPPE UC.
La publicación consistió, principalmente, en la revisión de una muestra de reglamentos de evaluación de los colegios, con la finalidad de contar con información actualizada respecto de las prácticas evaluativas en establecimientos educacionales chilenos.
El presente trabajo destaca que el uso de la evaluación como medio para generar un mejor aprendizaje, está únicamente marcado por el énfasis en los reglamentos de evaluación sumativa, la calificación y la promoción.
En ese sentido, da cuenta de la poca evidencia explícita respecto de las evaluaciones formativas como procesos complementarios al interior de la sala de clases.
La evaluación formativa es un proceso de monitoreo continuo y sobre la marcha. Su finalidad es recolectar evidencia acerca del grado de logro en el aprendizaje de los estudiantes, y que, al ser interpretada y utilizada por los docentes -y también por los propios estudiantes- sirve para tomar decisiones mejor fundadas sobre los pasos a seguir en el proceso de enseñanza-aprendizaje.
Alejandro Carrasco, Director de CEPPE UC, destacó que “Chile ha puesto excesivo foco y recursos en la evaluación externa estandarizada y ha olvidado la importancia que tiene para el aprendizaje la diversificación y mejora de la evaluación interna de los colegios para propósitos formativos. Este Policy Brief contribuye al diálogo en esa dirección”, señaló.
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